Me río sola cada vez que veo una receta por internet que pretende ser una receta “auténtica” de patatas bravas. No sería capaz de decir qué es una patata brava auténtica, ya que cada bar y restaurante las hace a su manera. Claro que tiene que haber patatas y una salsa, normalemente (pero no excluyente) a base de tomate. Sin embargo, la variedad de técnicas de cocción e ingredientes en la salsa es insondable. Como soy tan adicta a las patatas, solemos pedir patatas bravas cuando salimos de tapas, lo que es casi cada semana y ya hemos ubicado nuestros bares preferidos, a algunos de los cuales sólo vamos por las patatas bravas. Mi versión de patatas bravas implica ahumar las patatas antes – una técnica con la cual he estado experimentando recientamente desde que me fabriqué de la nada, como MacGuyver, una ahumadora casera con dos bandejas de papel de plata y malla de alambre.
La técnica es muy sencilla: pon un pequeño puñado de virutas de manzano para barbacoa, previamente remojadas en agua durante un mínimo de 30 minutos, en un rincón de la bandeja y coloca verduras encima de la malla de alambre. Las virutas de manzano se compran en el área de barbacoas de una ferretería. Normalmente pongo un par de latas encima de la tapa para juntar mejor las dos partes, aunque se escape un poco de humo igualmente. No he tenido ningún problema con el humo, la campana hace bien su labor. Pongo el lado de la bandeja con las virutas directamente sobre la vitro a fuego alto hasta que las virutas empiecen a humear y luego reduzco a fuego medio. Nosotros tenemos vitrocerámica, no sé cómo funcionaría en una cocina de gas; si alguien lo prueba que me lo diga. La mejor manera que he encontrado para hacer las patatas bravas ahumadas es asarlas primero en el horno hasta que estén medio hechas y luego terminarlas en el ahumador durante unos 45 minutos para darle un toque de sabor a barbacoa ahumada.
Patatas Bravas Ahumadas (Como Ahumar en una Cocina Vitrocerámica)
Ingredientes
- Papas cortadas en cuña
- Aceite de oliva
- Perejil para decorar
Para la salsa brava
- 3 cucharadas de aceite de oliva
- Media cebolla a dados
- 2 dientes de ajo picados
- 1 lata de 390 gramos de tomates enteros
- 1 cucharadita de pimentón ahumado
- ½ cucharadita de cayena
- ¼ cucharadita de pimentón dulce
- 1 cucharada de vinagre de jerez
- 1 cucharadita de sal
Instrucciones
- Precalentar el horno a 200°C. Mezclar las papas con un poco de aceite de oliva y repartirlas en una bandeja para hornear un una capa. Asarlas hasta que estén medio hechas – blandas por afuera pero todavía un poco duras por dentro – alrededor de 20 minutos.
- Mientras tanto preparar la salsa brava. Calentar el aceite en un sartén a fuego medio. Añadir la cebolla y pochar – alrededor de 5 minutos. Añadir el ajo y saltear durante un minuto más hasta que suelte el aroma. Adicionar los tomates y aplastarlos con una cuchara. Añadir los ingredientes que faltan y dejar cocinar a fuego medio hasta espesar al gusto. Retirar del fuego y dejar enfriar. Finalemente, trasladar a la batidora y batir hasta homogenizar.
- Poner un puñado de virutas, previamente remojadas en agua durante un mínimo de 30 minutos, en un lado del ahumador. Colocar la tapa del ahumador y poner el borde del ahumador sobre la vitro a fuego alto hasta prender las virutas y lograr un buen flujo de humo. Introducir las papas a medio hacer en el ahumador y volver a colocar la tapa. Bajar a fuego medio. Si las virutas dejan de humear subir un poquito el fuego. Debería salir una humareda continua del ahumador. Si las virutas estan carbonizadas y el humo se detiene por completo, añadir virutas nuevas y subir a fuego alto hasta que empiezen a humear de nuevo. Ahumar las papas hasta que estén blandas por dentro y ajustar el punto de ahumado al gusto – entre 30 y 45 minutos. Sazonar y servir condimentadas con la salsa brava y perejil.
Nane says
Es genial la idea! tengo que probarlo!